PASEANDO FRENTE A TUS OJOS

    En la fotografía como en la vida, hay muchos caminos que tomar, que vivir, que sentir. Cada uno de ellos guarda pequeños destellos de luz y de sombras, de críticas y de halagos. Porque la fotografía no sólo es un arte que atrapa momentos, que nos ayuda a no olvidar o más bien, nos ayuda a recordar, a pasar dos veces por el corazón sino que nos ayuda a detenernos, a pensar, a reflexionar, a criticar, a crear, a soñar...

    El reto que teníamos entre nuestro visor y nuestra mente (también un poquito de corazón) nos lanzó a las calles de nuestras ciudades, de nuestros pueblos. Nuestra amiga Reyes nos retó a atrapar esa nueva normalidad que nos rodea (¡mira que es fea e irreal esa expresión creada por quien ve el mundo desde un despacho!) . Porque ahora no entendemos nuestra vida sin la mascarilla aunque reneguemos de ella, aunque pretendamos huir de ella llenándola de colorido, de formas, de maneras de llevarla... Y en eso consistía nuestro reto: en un ejercicio de fotografía callejera (uno de esos caminos de los que hablábamos al principio).

    Tras el merecido parón veraniego, retomamos con ganas nuestros retos quincenales. La participación ha sido elevada, signo evidente de nuestras ganas de "atrapar momentos". Y entre todas ellas, la fotografía de nuestro amigo y presidente Manuel Tapia, se alzó con el galardón. Merecido, muy merecido.

    Nuestro amigo Tapia con su fotografía no sólo ha captado a un ciudadano que se protege y protege a los demás sino que también ha hecho un ejercicio de crítica, de reflexión. Dicen que cuando una fotografía detiene nuestra atención y nos recreamos en la misma es que estamos frente a buena fotografía. Y eso es lo que es ésta, una imagen donde todo está en el lugar que corresponde, donde la historia que nos cuenta nos hace pensar, reflexionar. Y la elección del blanco y negro, no hace más que potenciar el mensaje, sin distorsiones, sin distracciones de color que pueda hacernos perder la esencia. Enhorabuena amigo por tan certero mensaje.

Y tras la "nueva normalidad" volvamos a la dulzura del chocolate. Ese, ese es nuestro nuevo reto.

¡ VAMOS A POR EL CHOCOLATE!